Cómo dejar fácilmente de ser un boludo.

Creo que es una buena practica intentar asumir nuestras limitaciones.  No todos somos lindos, sexy, divertidos, graciosos e inteligentes. Es prácticamente imposible cumplir con todos esos parámetros al mismo tiempo. ¿Y qué es lo que pasa cuando intentamos ser algo que no somos? Parecemos unos boludos.  Es como ir a la guerra con arco y flecha cuando los contrarios pelean con tanques de guerra.

Si nos mostráramos tal cual somos en lugar de aparentar algo que no, seríamos mucho más atractivos a los ojos del resto, nos alejaríamos del ridículo y eso nos daría más seguridad en nosotros mismos.

Puedo ser divertida, puedo ser inteligente, pero definitivamente no soy sexy, ni seductora, ni nada por el estilo y las veces que quise hacerme la linda para conquistar a algún muchacho, sin lugar a dudas, me fue tan, pero tan mal, que los señores en cuestión se deben estar preguntando hasta el día de hoy, cómo puede ser que una mina pueda llegar a ser tan pelotuda.

En fin, tengo un día del orto. Mi autoestima quedó finiquitada por un discapacitado emocional y un descerebrado gato salsero; necesito amigarme un poco conmigo misma y se me ocurrió que esto podría ser un buen comienzo.  (Mentira, en realidad necesito mimos)


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Como frutilla del postré de este maravilloso día, me acabo de enterar que el departamento que me gustaba y por el cual me demoré 3 días para decidirme, ya lo reservaron.

Ommmmm ommmm ommmmmm