viernes, 12 de marzo de 2010

Sí, lloro y qué?

Es como si volviera a tener 5 años y me atacara una terrible tristeza injustificada porque mi mamá lo defendió a mi hermano en vez de a mi en una de nuestras tantas peleas, pero ahora es porque ya somos grandes y no nos peleamos más como antes. Ahora somos hermanos de verdad y cuando digo “mi hermano” lo hago toda orgullosa, y este hermano me acaba de decir que consiguieron casa con la novia y hoy la señaron para comprarla. Sé que debería estar contenta por él y toda la historia, pero la verdad que no me sale, lo único que me sale es llorar y llorar y no puedo parar de llorar aunque es como esa tristeza de los 5 años, una tristeza terribleeeeeeee pero que sabes que no es para tanto.

Lloro porque no me lo contó antes, lloro porque el miércoles me enteré por mi cuñada de toda esta movida, lloro porque mi hermano no lo compartió conmigo ni con mis viejos, me dijo “es que no pensé que se fuera a dar, para mi no había ninguna posibilidad”, igual, no me lo contó, lo compartió con la familia de ella y no son la suya. Lloro porque ahora odio a mi cuñada, esa conchudamalparidaquelotieneagarradodelaspelotasportantochuparlelapija que se lo lleva y lloro porque se lo lleva y no va a estar más para tomar mate conmigo a la mañana en el baño mientras me pinto, ni va a venir a pedirme puchos antes de irse a acostar y se va a quedar charlando conmigo esos 10 minutos que se puede estirar el pucho de antes de dormir. Lloro porque se suponía que yo por ser la más grande me iba a ir primero y ahora no va a ser así, lloro porque ahora voy seguir en mi casa, con mis viejos y 28 años. Lloro porque lo voy a extrañar, lloro porque estoy desilusionada porque nos dejó afuera a mis viejos y a mi de todo esto, lloro porque me siento frustrada por mi, lloro porque soy una egoísta, lloro y me enojo porque soy una maricona y porque en el fondo tengo 5 años y los nenes de 5 años cuando lloran no son racionales, lloran y punto, y lloro porque lo voy a extrañar.

Sé que no tiene sentido llorar como estoy llorando porque esto que es bueno para él y si él es feliz... y tenes que acompañarlo... y tenes que ponerte contenta por él... y bla bla bla... y que se vayan todos a la mierda, a mi me dan muchas ganas de llorar y lloro y punto y chau.

8 comentarios:

  1. Y si, es una reacción por demás entendible y no hay racionalidad que valga.
    Se te muda el compinche, el amigo, el compañero. Y que importa si es para avanzar, para hacer su familia. A una le importa UNA. Y bueno nena, no queda otra que asimilarlo y acudir al útil cliché de "si querés shorar, shorá!"

    ResponderEliminar
  2. Llora, llora que no cuesta nada.

    ResponderEliminar
  3. sabes que?
    Llorar aca tiene todo el sentido del mundo.
    Cuando algo que nos pasa nos cae de sopetón como balde de agua fría nos abrumamos. Y algunos se encierran en una coraza mala onda, y otros (y me incluyo) lloramos y lloramos y lloramos y lloramos hasta el hartazgo, hasta que ya no te dan mas ganas de llorar.

    Banco tu estado de animo
    y por cierto, me encanta como obvias los espacios para las puteadas! jaja

    ResponderEliminar
  4. Ya lo dijo Moria: Si querés llorar, llorá!

    ResponderEliminar
  5. Esas lagrimitas muestran la linda relación que hay! jaja no es mi caso YO GRITARIA DE FELICIDAD si se van jaja.

    ResponderEliminar
  6. Sol, cuanta razón tenes. Es lógico que te den ganas de llorar y después cuando estés mejor decile a tu hermano todo lo que lo vas a extrañar.

    Saludos.

    ResponderEliminar
  7. Siempre sufre y extraña más el que se queda...!!
    Llorá que te va a hacer bien descargarte...!!

    ResponderEliminar

Diga nomás